Patrimonio Arquitéctonico

Casas Solariegas

Nos adentramos por la Calle Mayor de Alcolea comenzando desde la Plaza la Unión con la Casa del General continuando hasta el final de la Calle Alfonsos, podemos descubrir numerosas casas infanzonas del Valle del Cinca que se remontan a los siglos XVII y XVIII. Vislumbramos la acumulación de un esplendor pasado vertebrado por un presente con influencias de distintas épocas que sorprende en cada paso.

Casa Nogueras

Monumental casa que se halla en la Calle Mayor de la Villa, conserva el esplendor de una época por fuera y por dentro dando majestuosidad a la Calle Mayor. Destacable su escudo presidiendo la fachada perfectamente restaurada.

Un escudo imponente partido en dos: un fuerte almogávar con palo, escudo y coraza y un nogal.

Casa Regales

Casona en la Calle Mayor 10. Restaurada recientemente en muy buen estado. En 1776, hubo demanda de parte de Manuel Regales y sus hijos, vecinos de Alcolea frente al Duque de Alba sobre infanzonía en su propiedad en el Casal de la misma villa en la plaza del Agua (Antiguamente se la conocía como plaza de las Cebollas, hoy Plaza Neptuno)

Escudo de Armas- Cheuron de oro y sobre el tres crecientes de luna roja y en los espacios y humos dejaba el cheurón tres estrellas de oro, todo sobre campo azul.

Casa Pitarque

Precioso caserón, con amplio patio de cantos rodados y dependencias que hoy todavía conservan regusto señorial con vestigios de épocas pasadas. 

Escudo de Armas- Escudo partido en faja, en la parte superior un pino y a el asidos dos leones en campo de oro; abajo cinco flores de lis en campo de gules.

Casa Monte y Samitier

Son dos casas en la Calle Alfonsos o calle abajo que guardan el recuerdo y la memoria de épocas pasadas donde gigantescos caserones imperaban en el casco urbano de la localidad. 

En Casa Monte destaca la puerta y Casa Samitier aunque abandonada…produce un gran impacto al visitante sí logras conectar con la austera arquitectura y la preciosa forja que todavía hoy conserva.

Otros lugares de interés

Castillo de los Entenza y Santa Cruz

El castillo de Alcolea de Cinca es mencionado en las crónicas de Al-Razí como uno de los castillos musulmanes que dependían del distrito de Lérida. En el año 714, los conquistadores musulmanes llegan a Alcolea. En los primeros documentos se menciona a Alcolea-Alcolegia (termino árabe) en el año 1089. Su impacto visual en el entramado urbano es característico. Tras su reconquista cristiana perteneció al llamado como reino de Monzón, creado en 1089 y cuyos límites señaló Pedro I en junio de 1092. Se perdió en manos almohades y vuelto a recuperar en 1141 por Ramón Berenguer IV se encomendó para su defensa y disfrute a la orden del Temple. Se sabe que en 1417 el duque de Gandía lo vendió a Alfonso V para que pudiese entregarlos a la infanta Isabel, esposa de Jaime de Urgel.

Sus restos se localizan sobre la falda de una montaña que protege la población y que está culminada por una gran cruz dedicada a Cristo, SANTA CRUZ. Existen restos de un edificio de planta rectangular, elevados en sillarejo con argamasa de cal que podrían ser parte de la primitiva fortificación musulmana reutilizados con posterioridad como ermita. La fortaleza musulmana debió de estar estructurada en dos niveles. La zona más elevada, la actual ermita de Santa Cruz, constituiría un recinto superior o torre defensiva del que se conservan elocuentes restos arquitectónicos; lienzos de murallas de sillería y gran longitud reforzadas por contrafuertes rectangulares, que sirven de muros de contención para los desprendimientos de tierra de la montaña. En su parte superior existe una plataforma de gran extensión, donde anteriormente se asentaba el castillo. En la parte baja de la muralla había sótanos y pasadizos ya cegados, que la tradición popular dice que comunican la iglesia de la villa y el palacio residencial del señor feudal. 

Al lado de los restos del Castillo Entenza se puede subir al pequeño Tozal de Carrasco desde el que se puede visualizar el casco antiguo de la localidad con profunda influencia árabe.

El Castillo de los Entenza está incluido dentro de la relación de castillos considerados Bienes de Interés Cultural en virtud de lo dispuesto en la disposición adicional segunda de la Ley 3/1999, de 10 de marzo, del Patrimonio Cultural Aragonés publicado en el año 2006.

Iglesia

Fue construida en el siglo XVIII en estilo neoclásico  con tres naves divididas por pilastras y en ella se hace una capilla honda con el retablo dedicado al Santo Cristo de los Milagros al que se venera en ella. Es cuando Alcolea se salva de la gran peste del siglo XVIII  que se crea la cofradía del Santo Cristo de los Milagros, en el año 1750,  para dar gracias por ello y para celebrar la fiesta mayor de la localidad en su honor el 14 de septiembre.

El día 1 de Octubre de 1765, mientras se encontraba todo el pueblo reunido en la iglesia, sobrevino un terremoto, que hizo creer a los alcoleanos que se quedaban sepultados entre las ruinas del templo. 

La capilla de Santa Ana, ubicada en el cementerio actual, hizo las funciones de templo parroquial hasta que el 5 de febrero de 1766 empiezan los mismos vecinos el derribo del templo antiguo. El templo fue emplazado un poco más atrás del lugar donde estaba el antiguo y se puso la primera piedra del ábside el día de San Pedro Apóstol en 1767 con la presencia de todo el pueblo.

Se estreno el nuevo templo el 12 de enero de 1783.

iglesia

Ayuntamiento

Palacio de los Alba (Casa Consistorial)

Época Renacentista, siglo XVI-XVII. Edificio palacio de la Casa de Alba, que ostentó el señorío de Alcolea entre 1588 y 1812, siendo su último titular Don Carlos Miguel Fitz-James Stuart, XVI Duque de Alba. 

Su estructura característica de la arquitectura civil aragonesa aplicada entre los siglos XVI y XVII en la construcción de grandes inmuebles como casas consistoriales y señoriales. La planta baja esta definida por un patio o lonja abierta a la plaza con seis arcos de medio punto sobre la base de sillares y arcos de ladrillo. El arco lateral tiene capiteles toscanos y rosca decorada con relieves. El pilar que lo sustenta fue un viejo escudo de Alcolea basado en una falsa etimología del nombre de la villa que lo relacionaba con una “col”. Tiene una inscripción y a su lado se tallo en el siglo pasado otra versión.

Además de lonja, el palacio de los Alba ha albergado otras dependencias de uso público como la cárcel, los almudines, el horno y las escuelas. Actualmente acoge en su primera planta las oficinas municipales, salón de plenos y archivo. En la segunda planta las dependencias corresponden a la biblioteca municipal, escuela de adultos, telecentro y locales de asociaciones.

Cantoner

La arquitectura urbanística de Alcolea adquiere múltiples influencias con el paso de los años, solo darse un paseo por el casco antiguo y sus calles próximas a la zona de los restos del Castillo te trasportan a épocas pasadas. Calles sinuosas y muy estrechas combinadas con el contraste vanguardista de la gran Avenida de la Constitución. Como enclave destacable podemos destacar el CANTONER, un callejón (Calle pequeña) en plena calle Mayor que conserva la arcada que lo señala. Un sitio especial que conecta el pasado con el presente cruzando una calle.